martes, 22 de mayo de 2012

Que el PRI no vuelva a los Pinos

Por fin me toca votar. Debo admitir que de unos años para acá esperaba con ansias este momento; el ideal de ser parte activa de un cambio en esta sociedad me atraía en demasía.
  En fin, pues se me llegó la hora y de inmediato sentí que mis sueños guajiros se iban por el caño: lo primero que dije al ver a los candidatos fue "ni a cuál irle". Me encontré en un episodio de depresión democrática fatal que no hizo sinó incrementarse con los pasajes partidarios de parte de PAN y PRD en contra de el candidato priísta Enrique Peña Nieto.
  Antes de cualquier otra cosa debo aclarar que yo no soy partidario de este personaje y que las convicciones que me motivaron a crear esta pequeña nota son esa mencionada depresión y la lástima que me da ver que los competidores de este personaje le dan más fuerza y renombre con sus desesperdados, porque no existe otra manera de nombrarlos, intentos de crear una mala imagen del candidato priísta.
  ¿Es que acaso no se dan cuenta de que esos comerciales en contra no hacen sinó demostrar el miedo que tienen de EPN y su partido? Si esto no fuera así no habría un porqué de estos ataques. Lo cierto es que los movimientos del PAN como principal actor y el PRD como adyubante sólo demuestran la debilidad en que se muestran sus partidos en contra de EPN.
  Repito, esto no es politica peñanietista, sino un simple reclamo contra esos partidos que no saben hacen buena política e intentan lograr sus cometidos de una manera que cualquier mexicano debería poder notar como contraproducentes, pero lo cierto es que este país posee una cultura por el fanatismo partidista que esta intervención no podrá mover y que nubla la visión crítica de las personas. Lo más tragico es que esta tendencia de la mala fama a Peña Nieto ya se extendió entre la población y como ejemplo les traigo las marchas anti-Peña Nieto.
  Estoy deprimido por las condiciones democráticas que este, mi país, ha demostrado en esta campaña, pero lo cierto es que en este caso un priísta, Manlio Fabio Beltrones, dijo las palabras más pertinentes que podrían existir: El voto debe ser a favor, y no en contra, de algún partido político.

-R-